
Hoy Día Mundial de la Actividad Fisica: Más sendentarismo, más enfermedades
En los últimos años ha habido un continuo incremento en la prevalencia de enfermedades no transmisibles (ENT) y, en particular en las enfermedades cardiovasculares. Esto se debe a varios factores: cambio demográfico con más adultos mayores; a procesos de urbanización y globalización; a estilos de vida menos saludables entre ellos, el incremento de las actividades laborales y recreativas que implican un comportamiento sedentario.
La insuficiente realización de actividad física se considera uno de los mayores factores de riesgo en el desarrollo de las enfermedades cardiovasculares e incluso se ha establecido una relación directa entre el estilo de vida sedentario y la mortalidad cardiovascular.
Se ha demostrado que las personas más sedentarias presentan elementos de riesgo para enfermedades cardiovasculares y metabólicas, como son parámetros inflamatorios y de resistencia a la insulina más altos que los no sedentarios, de manera independiente de la actividad física realizada. Por lo que es fundamental de forma simultánea tratar de ser más activos y menos sedentarios.
En el marco del Día Mundial de la Actividad Física que se celebra este 6 de abril, desde la Comisión Honoraria para la Salud Cardiovascular, reforzamos nuestro compromiso con la promoción de la actividad física y el movimiento como una línea clave para proteger la salud cardiovascular y reducir el riesgo de enfermedades de este tipo.
Falta de tiempo, falta de costumbre o costos elevados como limitantes.
Las barreras o limitantes de la actividad física suelen ser la falta de tiempo, falta de costumbre o que es muy costoso ir a un gimnasio.
Las personas suelen percibir que la actividad física es solamente practicar un deporte, cuando en la realidad, todo el movimiento cuenta y el objetivo es lograr disfrutarlo. Cada paso que se da durante el día, cada minuto de actividad y movimiento que aumenten nuestro gasto energético ya sea en el trabajo, transporte, tiempo libre o estudio, cuenta.
No existe una forma única de ser activos para todas las personas, sino que cada uno puede seleccionar de qué manera disfruta del movimiento. “Es cuestión de desprendernos de los mitos de no tener tiempo y encontrar algo que nos motive”.
Se han desarrollado nuevos lineamientos para la realización de la actividad física por parte de la OMS que es necesario difundir, estas actualizaciones incluyen a la población de niños menores de 5 años y ajustes en las sugerencias de estímulo de actividad física para los adultos y los adultos mayores.
¿Obligación o estilo de vida?
Para que la actividad física y el movimiento sean parte de la cotidaniedad, los enfoques exitosos son los que demuestran una integración en múltiples niveles incluyendo familia, comunidad, lugar de trabajo, entorno físico y social. Para que una persona logre adquirir el hábito, incorporarlo en su estilo de vida y no lo sienta como obligación y sacrificio, deben ser actividades que provoquen el disfrute de quienes las realizan. Esta es la mejor manera para que sean mantenidas en el tiempo.
Acciones y actividades para promover el movimiento.
Este año queremos promover acciones que impliquen movimiento y que sean disfrutables: caminar, bailar, paseos al aire libre, gimnasios en plazas y espacios públicos, elegir transportes activos como bicicletas, entre otras tantas cosas.
Las políticas públicas e intervenciones para promover sociedades, poblaciones, entornos y sistemas activos son lo más importante. Está comprobado que para el caso de los niños y adolescentes las intervenciones más efectivas son las que se realizan en el ámbito escolar y en colaboración con la familia.
Además, resulta fundamental la consejería médica sobre la prescripción de la actividad física. Desde la CHSCV, promovemos las actividades de formación del personal de salud y construimos en un trabajo interinstitucional una “Guía de prescripción de la Actividad Física para médicos” con herramientas e información para lograrlo.